La tarde de este domingo 25 de julio de 2021, Nicolás Maduro anunció la detección de dos casos de la variante delta en Venezuela. Ambas personas llegaron a Venezuela por el Aeropuerto Internacional de Maiquetía y, según informó, estarían aisladas. 

Con la detección de la variante delta a países de la región como Estados Unidos, Brasil y Colombia, su llegada a Venezuela era cuestión de tiempo. La Academia Nacional de Medicina alertaba en su más reciente boletín la necesidad de acelerar la vacunación y preparar al país para la llegada de esta variante. “Si la variante delta no está circulando ya en Venezuela, es de esperar que pronto lo estará”, advertía el boletín.

Hace una semana, en una entrevista con Prodavinci sobre los cambios de protocolos en las vacunas, el médico Manuel Figuera Esparza advirtió que la variante delta, debido a su alta transmisibilidad y su capacidad de evadir anticuerpos, sería una variable importante en el curso de la pandemia en el mundo. “Esta variante delta es y va a hacer que la epidemia sea distinta”, dijo.

Delta es el nombre que le asignó la Organización Mundial de la Salud a la variante B.1.617.2, surgida en la India y considerada una variante de preocupación. Esta variante ya se ha confirmado en 105 países y se sospecha que circula en otros 19, según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC). La variante delta es actualmente la dominante en varios países, como India y Reino Unido. Se estima que uno de cada cinco casos de covid-19 en Estados Unidos corresponde a la variante delta.

¿Qué debemos saber y cuáles son las implicaciones de la variante delta? Conversamos con la viróloga Flor Helene Pujol, jefa del laboratorio de Virología Molecular del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), donde se realiza la secuenciación del virus SARS-CoV-2 en el país; y con el médico internista infectólogo Manuel Figuera Esparza, presidente de la Sociedad Venezolana de Infectología.  

1. Es una variante más contagiosa

Los datos muestran que la variante delta es más contagiosa que la variante alfa que, a su vez, ya era más contagiosa que la cepa original del SARS-CoV-2 que surgió en Wuhan a finales de 2019.

“Básicamente lo más preocupante es su alto poder de transmisión. Se calcula que, con respecto a la cepa original que surgió en Wuhan, la variante delta es hasta tres veces más transmisible. Es decir, si yo tengo un contacto tengo tres veces más probabilidad de infectarme que con la cepa original”, explica la viróloga Pujol.

En Venezuela ya era dominante la variante gamma, que también es más contagiosa que la cepa del virus original. Según informó Pujol en una entrevista concedida a Prodavinci, en Venezuela ya circulaban las variantes alfa, gamma y lambda.

Uno de los indicadores que se utilizan para estimar y predecir el comportamiento de una epidemia es el número básico de reproducción, representado como R. Este indicador señala cuántas personas pueden ser contagiadas por un paciente infectado, asumiendo que la población es susceptible y no está vacunada.

“Es mucho más contagiosa. El R, el número de reproducción básico en el SARS-CoV-2 original se estimaba que era entre 1,5 y 2. Con la variante alfa eso se duplicó y con la variante delta este número podría subir a 6 u 8. Una persona infectada tiene chance de infectar a muchos más”, dice Figuera.

2. Tiene capacidad de evadir anticuerpos

El segundo aspecto preocupante de esta variante es que tiene ciertas mutaciones que le permiten evadir parcialmente los anticuerpos neutralizantes, tanto los generados por el organismo después de tener covid-19, como los generados por las vacunas.

“Las mutaciones que tiene son muy distintas a las tres otras variantes (de preocupación). No tiene ni a Nelly (N501Y) ni a Erik (E484K), pero tiene otras mutaciones que también le confieren cierta habilidad para evadir parcialmente la respuesta protectora. Por lo tanto, aún vacunado voy a tener un poco más de chance de infectarme. Primero porque es más transmisible y segundo porque evade parte de los anticuerpos neutralizantes. Pero eso no quiere decir que voy a enfermar”, dice Pujol.

Por su parte, Figuera explica que esto implica que ante esta variante hay más posibilidades de reinfecciones. Es decir, que las personas que ya tuvieron covid-19 puedan tener la enfermedad nuevamente.

3. Todavía no hay evidencia de que cause un desarrollo más severo de la enfermedad

Mayor transmisibilidad no necesariamente implica que la enfermedad sea más grave. Hasta ahora, no hay evidencia fuerte que demuestre que la variante delta causa enfermedad más severa.

“La carga viral, la concentración de virus que hay en el hisopado, en promedio es mil veces más alta en esta variante que en las otras variantes que estaban circulando. Entonces también por eso tiene más probabilidad de que infecte a los niños y las personas jóvenes. Con respecto a la virulencia, no hay evidencia sólida de que esté asociada a una mayor gravedad. Lo que sí pareciera, pero hay que esperar la evidencia, es que quizás la evolución es más rápida. Como tiene una carga viral muy alta, entonces rápidamente vas a pasar a los síntomas. Pero no hay evidencia de que sea más letal”, explica Pujol.

“Esta variante tiene una mayor capacidad de fijarse a las células, por lo cual de algún modo pudiera tener hasta cierto punto algo de mayor agresividad, pero ese aspecto no se ha determinado tanto como con la variante Alfa (…) También se ha visto una respuesta disminuida en cuanto a la capacidad de los anticuerpos. Con el tratamiento de plasma de convaleciente la repuesta es mucho menor. Igualmente con estos anticuerpos monoclonales, también la respuesta es inferior”, explica Figuera.

Si bien no hay evidencia de que cause una enfermedad más agresiva, al ser más contagiosa sí puede causar muchos más casos. Al haber más casos, se reportan más hospitalizaciones y muertes por la enfermedad. Si el aumento se da muy rápido puede sobrepasar la capacidad de atención del sistema de salud.

4. La vacunación funciona y es importante cumplir las dos dosis

Si bien esta variante ha demostrado capacidad de evasión inmune parcial, estudios recientes muestran que las vacunas siguen funcionando. Si bien las vacunas no necesariamente evitan la infección con el virus, sí evitan el desarrollo de síntomas de la enfermedad y, sobre todo, hospitalizaciones y muertes.

“Más del 90% de los pacientes que están ingresando a hospitales en este momento en Estados Unidos son individuos no vacunados. Y los que mueren, lo mismo. Es decir, me infecto, pero sigue protegiendo las vacunas en general contra enfermedad grave”, explica Pujol.

Un estudio de Salud Pública de Inglaterra publicado como preprint en mayo mostró que la efectividad de las vacunas de Oxford/AstraZeneca y Pfizer para evitar enfermedad sintomática de covid-19 era menor ante la variante delta. Esto era más notorio cuando se aplicó solo la primera dosis de las vacunas.

Ambas vacunas tuvieron efectividad de 33,5% tres semanas después de la primera dosis para evitar enfermedad sintomática, mientras que dos semanas después de la segunda dosis la vacuna de Pfizer reportó efectividad de 87,9% y la de Oxford/AstraZeneca 59,8%.

La efectividad para evitar hospitalizaciones y muertes sigue siendo alta. Un estudio más reciente de Salud Pública de Inglaterra muestra que después de dos dosis, la vacuna de Pfizer es 96% efectiva para prevenir hospitalización y la de Oxford/AstraZeneca es 92% efectiva.

 “La protección que brinda la vacuna es algo inferior a la que brinda con otras variantes. Las vacunas protegen, pero no tan bien como protegían con variantes anteriores, y para que protejan bien -y este es el elemento más fundamental de la variante delta- hay que haber recibido las dos dosis de vacuna. Todas las vacunas hoy en día, excepto la de Johnson & Johnson, requieren dos dosis. Con lo que está sucediendo a EEUU, se sabe que más del 90% de los casos están ocurriendo en personas no vacunadas o parcialmente vacunadas. Eso es relevante para Venezuela porque aquí la población no está vacunada”, explica Figuera.

La situación en Inglaterra es similar a la de Estados Unidos. Aunque reportan más casos, las hospitalizaciones y muertes son menores que durante su segunda ola y eso se atribuye a la vacunación. También más del 90% de los hospitalizados son personas no vacunadas o que han recibido una sola dosis.

5. Mientras más contagiosa, más personas se deben vacunar

Cuando una variante es más contagiosa y aumenta su R, el umbral para alcanzar la inmunidad de rebaño aumenta. Como comentaba el infectólogo Figuera, especialistas han estimado que el R de la variante delta es 6 en un contexto donde la población es susceptible, no está vacunada y no tiene muchas restricciones. Este R sería al menos tres veces más alto que el del virus original.

Esto no solo implica que la variante es más contagiosa, también tiene otra consecuencia: el porcentaje de la población que se debe vacunar para alcanzar la inmunidad de rebaño también aumenta.

Hasta ahora, se estimaba que el umbral para alcanzar la inmunidad de rebaño ante el SARS-CoV-2 era entre 60 y 70% de la población.

“La infección que tiene el R más alto es sarampión, que tiene entre 14-16. Su inmunidad de rebaño se alcanza con 95-96% de vacunados, para tener una mejor protección comunitaria. Definitivamente, con la variante delta el porcentaje de la población vacunada tiene que ser mucho mayor. Ese impacto lo estamos viendo en Israel, en Estados Unidos, en Reino Unido, donde alcanzaron unos buenos niveles de vacunación porcentual, pero no ha sido lo suficiente como para evitar que ocurran nuevos casos y lo que está ocurriendo semanas antes”, explicó Figuera.

Se le llama inmunidad de rebaño a la protección comunitaria que se alcanza cuando suficientes personas de una población tienen inmunidad, usualmente debido a la vacunación, impidiendo que el virus se siga propagando. Esto funciona como una doble protección: a nivel individual cada persona vacunada está protegida de la enfermedad, a nivel comunitario, el conjunto vacunado protege como una barrera a las personas que no pueden vacunarse o no generan una buena respuesta inmunitaria por distintos motivos (porque son muy jóvenes, porque todavía no hay vacunas aprobadas para niños en algunos países, porque tienen un sistema inmunológico débil o suprimido, entre otros).  

6. No todos los casos son graves y la presentación de síntomas es similar

Figuera señala que el manejo clínico de casos con la variante delta sigue siendo similar al virus original: “Lo que uno ha visto de distintos países donde ha ocurrido la variante delta, sigue ocurriendo el mismo espectro de enfermedad. Hay personas asintomáticas, personas con enfermedad leve, con enfermedad moderada, enfermedad severa y enfermedad crítica. Lo que hay es especulación en el aspecto clínico de que podría haber algunas diferencias en el modo de presentarse. Podría tener más cuadros de síntomas gastrointestinales o más complicaciones trombóticas, pero realmente no hay ningún estudio que diga que hay diferencias clínicas desde el punto de vista de presentación”.

“La Organización Panamericana de la Salud no ha mostrado evidencia de que haya una diferencia en los síntomas”, señala Pujol.

La recomendación sigue siendo la misma hasta ahora:

Si presentas alguno de los siguientes síntomas debes aislarte para evitar posibles contagios: fiebre, tos, dolor de garganta, malestar, dolor de cabeza, dolor muscular, fatiga, pérdida parcial o total del olfato y el gusto, y diarrea. En casos graves se presenta dificultad respiratoria y saturación de oxígeno en la sangre por debajo de 94%. La enfermedad se puede manifestar con una combinación de estos síntomas, pero en muchos casos de covid-19 se presenta solo uno.

Si no tienes un médico tratante, la Universidad Central de Venezuela tiene el servicio Llamada SOS, donde puedes recibir atención médica vía telefónica por el número (0212) 313-5660. Es un servicio gratuito y confidencial que ofrece orientación para pacientes con covid-19.

7. A nivel individual es momento de reforzar la prevención

Si bien es una variante más contagiosa, las mismas medidas de prevención individual funcionan para evitar la transmisión.

“Son las mismas, solo que hay que redoblarlas. Ya habíamos hablado de la doble mascarilla para la variante gamma, con más razón para la variante delta. Las mismas medidas de prevención, el mismo tratamiento. Solo que no las relajemos”, dice Pujol.

“Por ser más contagiosa, quizás más que nunca es conveniente el uso de doble mascarilla para la población general, sobre todo en áreas de mayor riesgo, como puede ser el transporte, el metro (…) Parte de la percepción de la población, lo sé porque estoy desarrollando una encuesta, es que piensan que sufrir covid-19 es tener una infección severa, grave o crítica. No. La mayoría de las personas que se infectan van a tener una enfermedad leve, asintomática o moderada. Eso no cambia con la variante delta. El problema es que si esta variante es mucho más contagiosa, va a haber muchas personas enfermas al mismo tiempo y habrá una mayor saturación de los centros de salud” advierte Figuera.

Algunas recomendaciones para prevenir los contagios:

• Usar doble mascarilla y cuidar que tenga el ajuste adecuado. Puede ser una mascarilla quirúrgica cubierta encima con una mascarilla de tela. Si se van a usar dos mascarillas de material quirúrgico, la de mayor protección debería ir debajo (por ejemplo: primero una N95 o KN95 y encima una quirúrgica).
• Mantener el lavado de manos frecuente y uso de alcohol en gel.
• Mantener distanciamiento social: al menos dos metros de distancia de otras personas, especialmente en espacios cerrados.
• Evitar espacios cerrados, mantener una ventilación constante de los espacios, limitar el tiempo de contactos con otras personas y evitar aglomeraciones.

“La variante delta está en otros países de la región, está en Argentina, en Chile, y tampoco ha significado una cuestión dramática en general porque en otros países han vacunado, han educado. Lo que sí se ha visto de manera diferenciadora es que se están infectando muchos más, sobre todo en países como Indonesia, que no han vacunado bien a la población. Hay muchos más casos en jóvenes, en niños, pero eso es una circunstancia debido a que hay un mayor número de infectados. Eso no necesariamente implica que las cosas van a ser muy distintas a lo que vivimos con la gamma en Venezuela, pero con la delta las medidas de prevención tienen que ser mucho mayores”, advierte Figuera.

8. A nivel de Estado se deben reforzar las políticas de respuesta

La viróloga Pujol considera importante atender la percepción que genera la flexibilización de medidas, que puede provocar una falsa sensación de seguridad en la población. Pujol recomienda:

“Definitivamente, dentro de todo está bien no flexibilizar más desde el punto de vista de la percepción de la comunidad que puede pensar que estamos mejorando. No. Entró la delta, no bajamos de mil casos diarios. Recordar las medidas de prevención y hacer el seguimiento de casos. Aumentar el diagnóstico molecular para identificar posibles contagiados y aislarlos adecuadamente para cortar las cadenas de transmisión. Y acelerar la vacunación”.

Por su parte, Figuera señala que es necesario reestructurar toda la respuesta a la epidemia de covid-19 en el país:

“No sé cómo se puede acelerar algo que no ha empezado de manera formal en el país, pero digamos que hay que acelerar las vacunaciones, hay que vacunar a la población más vulnerable, hay que vacunar a todos los que trabajan en salud. También hay que incentivar la educación de la población. Hay que optimizar el diagnóstico, no solo de las personas que tengan síntomas sino también el trazado de contactos. Incentivar las medidas de cuarentena voluntaria de quienes estén viajando a otros países. Igualmente mejorar la capacidad de los centros de salud a nivel hospitalario y, bueno, estar preparados de que vamos a tener muchos más casos”, dice Figuera.

En su boletín más reciente, la Academia Nacional de Medicina insistió en reforzar la prevención y asegurar la vacunación en Venezuela, con vacunas aprobadas y no candidatos vacunales:

“El peligro del ingreso de la variante delta es una fuerte señal de alarma para acelerar la vacunación en Venezuela, UTILIZANDO VACUNAS DE RECONOCIDA EFICACIA Y SEGURIDAD, Y NO PRODUCTOS EXPERIMENTALES DE DUDOSAS CARACTERÍSTICAS. Así mismo, se deben redoblar las medidas de prevención, tales como el uso de mascarillas, distanciamiento físico e higiene. Venezuela se encuentra todavía en un pico epidémico, por lo que es importante no relajar las conocidas medidas para impedir la transmisión de este virus”.

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