Paul Weller es el tipo más cool del mundo

22/05/2021

Según el diccionario tradicional, la palabra cool equivale a frío. Pero en 1940 Lester Young, el legendario saxofonista de jazz, le dio un giro a la palabra y cambió el significado. Fue el primero en decir «I am cool». Quiso decir que se encontraba relajado. La historia dice que Lester Young fue el primer artista en subirse a un escenario de noche llevando lentes de sol. Una persona cool es la que siempre, con un estilo personal, parece tener la situación bajo control. Madonna es cool, pero Lady Gaga no tanto. George Clooney nunca será tan cool como Marlon Brando, y Paul Weller ya tiene casi cincuenta años siendo el tipo más cool de la escena musical mundial. Algo que nunca será Chris Martin y sus amigos de Coldplay. Paul Weller es tan cool que, a falta de rivales, es la única persona en el mundo con todo el derecho de ser llamado el Modfather.

Los Mods son una subcultura que se originó en Londres a finales de los años 50, enfocada en la moda y la música. Su uniforme eran trajes hechos a la medida. El soul, jazz, funk, blues, ska fueron sus ritmos originales. Generalmente andaban en grupos. Se movían en Vespas particularmente decoradas. Abusaban de las anfetaminas. A mediados de los 60, con un sonido pop, pero con mucho poder y altas dosis de rebeldía, The Who, con el álbum My Generation, se encargó de darle un himno a esta tribu urbana.

Paul Weller nació en el condado de Surrey, muy cerca de Londres, en mayo de 1958. Como la mayoría de los ingleses de esa época, su amor por la música comenzó con los Beatles y continuó con The Who y Small Faces. En secundaria se inició en la guitarra y ya a los 14 años llenaba, junto a los que serían su primera banda, algunos locales nocturnos interpretando versiones de los Beatles y algunas canciones originales. Formó su primera banda en 1976, en la misma época que The Clash y los Sex Pistols. Se llamaba The Jam. Podría decirse que eran un grupo punk que adoptó la estética de los Mods, muy bien vestidos. Incorporó sonidos del rhythm & blues, motown con influencias de bandas como The Who y los Kinks. The Jam fue un éxito. La canción «That’s Entertainment» podría haber sido suficiente como para definir la carrera de un músico como exitosa, pero Paul Weller, como todo tipo cool, no se conformó. En 1982 disolvió la banda y al siguiente año, junto a un tecladista, un baterista y una cantante que terminó siendo su esposa, formó Style Council. Con este grupo se permitió experimentar una infinidad de estilos musicales: jazz, funk, house, baladas pop. A finales de los 80, bien sea porque ya estaban perdiendo popularidad o porque los tipos cool no pueden estarse quietos, Paul Weller decidió disolver la banda y comenzar su carrera en solitario.

Musicalmente ya lo hizo todo. Hasta la fecha son 16 sus álbumes en solitario. En los más de 30 años que han transcurrido desde su primer LP homónimo no ha dejado de crear, mezclar y experimentar con diferentes estilos musicales: acid, jazz, new wave, soul, electrónica, britpop. Ha logrado un sonido particular del que se vienen alimentando los principales músicos salidos del Reino Unido en los últimos años. Noel Gallagher es un fanático admirador de Paul Weller. Tanto, que lo invitó a tocar la guitarra y a cantar en los coros de «Champagne Supernova». Steve Cradock, el guitarrista de Ocean Colour Scene, y responsable del solo en «Riverboat Song», deja pendientes a sus compañeros de banda cada vez que Paul Weller lo requiere para alguno de sus álbumes. En 2006, Amy Winehouse en el Show de Jules Holland se paró firme delante de Weller y su piano para versionar «Don’t Go To Strangers», original de Etta Jones. Estoy seguro de que sin quererlo, porque el disco de Steven Wilson salió antes que el de Weller, «12 things I forgot», la canción más pop del disco más reciente de Steven Wilson, suena demasiado a «In Better Times», una de las dos baladas que forman parte de Fat Pop. Y es así, la marca Modfather es algo que todo el mundo desea llevar. Cada vez que hay visitas en casa y me piden que ponga algo de música, “pero no esas cosas que tú escuchas que no dejan ni hablar”, recurro a Studio 150, su séptimo disco del año 2004, en el que Weller hace covers de las canciones de los artistas que considera sus influencias. Hasta la fecha Studio 150 nunca me ha dejado mal. Siempre hay alguien que pregunta, “¿quién es ese que canta?”. 

Llegamos a mayo del 2021, y una infinidad de músicos, sobre todo solistas, han estado publicando el trabajo que hicieron en casa durante el encierro obligatorio del último año debido a la pandemia. Algunos discos han sido memorables, como el Paul McCartney III. Otros no han cumplido las expectativas, como el tan criticado Latest Record Project, Vol.1 de Van Morrison. Ninguno, hasta ahora, tiene tantas buenas canciones como Fat Pop, el nuevo disco del tipo más cool del mundo, Paul Weller.


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