Despachos desde Colombia: Los candidatos presentan sus planes de gobierno

La agenda de los candidatos presidenciales se mueve a lo largo y ancho de Colombia, entre debates en universidades, reuniones con los gremios y eventos políticos en departamentos clave para la búsqueda de votos y alianzas.

En una sala del hotel Cosmos 100, en Bogotá, las cámaras seguían de cerca al candidato del Equipo por Colombia, Federico “Fico” Gutiérrez, mientras caminaba de un lado a otro del escenario sobre el que presentó por primera vez, el pasado 6 de abril, su programa de gobierno.

“Que se acaben los discursos de odio, los discursos de lucha de clase, y que nos reconozcamos como lo que somos todos, que somos colombianos y queremos lo mejor para el país”, dijo Gutiérrez al inicio de su presentación.

Ese mismo día, al sur de la ciudad, Sergio Fajardo, candidato de la coalición Centro Esperanza, sostuvo un encuentro con expertos en políticas públicas, asesores y académicos, para incorporar propuestas e ideas a su plan de gobierno.

La sala estaba colmada. Alejandro Gaviria, exministro de Salud durante la presidencia de Juan Manuel Santos, moderó la sesión a la que se sumaron a través de videollamadas voces de la ciudadanía y de más de 200 expertos en políticas públicas. “Nuestro reto es recoger muchas iniciativas: completar, añadir y seguir perfeccionando lo que tenemos nosotros como propuesta para nuestro país”, dijo Fajardo.

Más temprano en el día, Fajardo se había reunido en Bucaramanga, capital del departamento de Santander, con un grupo de mujeres que compartieron inquietudes y sugerencias para que fueran incluidas en su plan de gobierno, y participó en un almuerzo con empresarios del grupo Pro Santander.

Por su parte, el candidato del Pacto Histórico, Gustavo Petro, ya había presentado su propuesta de gobierno el 25 de marzo. El plan fue elaborado por 753 personas, después de escuchar 2.340 propuestas en foros realizados en 18 regiones de Colombia. El candidato del Pacto Histórico ha abierto un componente de su campaña llamado “Petro te escucha”, en el que durante sus visitas a distintas ciudades del país recibirá propuestas para ajustar su plan de gobierno de acuerdo con las preocupaciones de la población.

Los planes de gobierno de los candidatos proponen una hoja de ruta que permite prever los tipos de gobierno, qué ideología rige sobre sus acciones, cuáles son sus prioridades e incluso quiénes podrían ser sus aliados y detractores por los próximos cuatro años.

El plan de gobierno de Fico Gutiérrez, llamado “Colombia: un país en orden y con oportunidades”, cuenta con más de 250 propuestas y establece 100 metas a alcanzar. El texto busca responder a cinco problemáticas en Colombia: inseguridad, corrupción, baja productividad y desempleo, democracia en riesgo, pobreza y desigualdad.

Economía

Gutiérrez promete liderar un crecimiento sostenido anual del PIB en un 5% y reducir la tasa de desempleo del 12% al 9%, a través de la generación de 1,2 millones de nuevos puestos de trabajo mediante incentivos empresariales para la contratación formal. El candidato del Equipo por Colombia apunta a una política de austeridad fiscal que busca reducir gastos burocráticos en un 10% y disminuir la pobreza del 42.5% al 33%. Se propone además, facilitar la entrada de emprendedores al mercado y “mejorar las reglas de juego para que en el ámbito empresarial la cancha sea más justa”.

Por su parte, el candidato Gustavo Petro, del Pacto Histórico, en su plan de gobierno titulado “Colombia: potencia mundial de la vida», dice que el crecimiento económico del país ha estado frenado por una política “extractivista” de recursos energéticos. Sostiene que Colombia se ha insertado en la economía global a partir de la exportación de materias primas sin protección de la industria nacional, lo que ha resultado en la imposibilidad de tener un aparato productivo fuerte, capaz de satisfacer las demandas internas y las exigencias de los mercados internacionales.

En términos de generación de empleos, Petro ve el trabajo como un derecho fundamental y plantea que, bajo su presidencia, sería el Estado quien contrataría a aquellas personas que puedan y quieran trabajar pero no logran encontrar una plaza en el sector privado. También sostiene que aumentará el acceso a créditos a las pequeñas y medianas empresas, con el objetivo de fomentar la contratación de personal.

La meta, dice el plan del Pacto Histórico, es “pasar a una economía agraria e industrial intensiva en conocimiento, con enfoque ambiental y con énfasis en el desarrollo de cadenas de valor añadido”. También apunta a reevaluar los tratados de libre comercio, proteger la producción nacional y mejorar la competitividad en mercados internacionales.

Sergio Fajardo tiene como objetivo realizar ajustes económicos para mejorar el desarrollo productivo, integrado a una estrategia de educación, ciencia, tecnología, innovación y emprendimiento.

El candidato sostiene que se deben aprovechar las capacidades de las regiones de acuerdo a su vocación productiva. Considera necesario aprovechar el potencial agrícola, industrial y de servicios de alta tecnología para generar más empleo. También estima como prioritario dejar atrás la dependencia del petróleo y el carbón en pro de una economía diversificada.

El candidato de la coalición Centro Esperanza establece la meta de triplicar el gasto en investigación y desarrollo, llevándolo del 0.3% al 1%, con un fondo público-privado de ciencia, tecnología, innovación y emprendimiento. De este modo, propone crear 1.5 millones de nuevos empleos, de los cuales estima que el 50% serían en el sector agropecuario y en la industria manufacturera.

En el plan energético, Fico Gutiérrez propone convertir al sector petrolero en el motor de la transición energética, y respalda al sector de hidrocarburos, prometiendo que contarán con “seguridad jurídica para la ejecución de sus proyectos”.

Gutiérrez señala que para garantizar “la seguridad integral” será vital la autosuficiencia de producción de petróleo. Apuesta a que los contratos de exploración y producción (69 de ellos firmados en los últimos años) permitan la reposición, por el descubrimiento de nuevos yacimientos, de reservas de gas y petróleo. De acuerdo con la Agencia Nacional de Hidrocarburos, en Colombia sólo hay reservas probadas de crudo para los próximos 6.3 años. El petróleo aporta entre el 12% y 15% de los ingresos corrientes del país.

Para lograr utilizar el petróleo como un recurso de transición a energías renovables, el plan de gobierno de Gutiérrez establece una posición que el candidato se había negado a decretar antes de las consultas interpartidistas: apoyará la explotación de crudo de yacimientos no convencionales mediante el fracking (fracturación hidráulica), método de extracción controversial por el impacto negativo que tiene sobre el medio ambiente y el riesgo potencial de contaminación de flujos de agua subterránea.

Por su parte, Gustavo Petro tiene una visión diametralmente opuesta. El candidato, que propone pasar de la economía extractivista en la que predominan los combustibles fósiles a una economía productiva descarbonizada, plantea la prohibición de la exploración y explotación de yacimientos no convencionales, aquellos que requieren del fracking para su explotación.

También destaca que no firmará nuevos contratos ni renovará licencias para la exploración de nuevos yacimientos de hidrocarburos y prohibirá la explotación de minería a cielo abierto. Si bien el documento sostiene que la transición energética contaría con el apoyo técnico y económico del estado, así como con nuevas oportunidades económicas y laborales en el sector de energías renovables, en 2021 el petróleo constituía el 3,3% del PIB y el 40% de las exportaciones de Colombia.

Sergio Fajardo. Fotografía de Juan Pablo Pino | AFP

Política Exterior

En términos de política exterior, el plan de Fico Gutiérrez busca incrementar la inversión extranjera en un 30% en sectores diferentes a los del petróleo y la minería, aumentar la participación de Colombia en el comercio internacional e importar conocimiento y tecnología para combatir el crimen organizado y promover la transición energética necesaria para adaptarse a los retos del cambio climático.

A nivel regional, se establece el deseo de fortalecer los lazos comerciales con América Latina, particularmente con Chile, Perú, Ecuador, Brasil, México y Costa Rica. Venezuela, por su parte, no es mencionada en el documento.

No obstante, en el primer debate presidencial luego de las consultas interpartidistas del 13 de marzo, organizado por Semana y el diario El Tiempo, Fico Gutiérrez dijo que no reestablecería relaciones con Venezuela.

“A Maduro no se le puede reconocer como gobierno porque es una dictadura y quienes defendemos la democracia y las libertades no podemos hacer eso”, dijo Gutiérrez.

Por su parte, el candidato Sergio Fajardo propone “desideologizar” la política exterior y adelantar relaciones diplomáticas plurales y diversificadas que permitan otorgar prioridad al interés nacional, la reciprocidad y el beneficio mutuo.

Fajardo aboga por la integración de América Latina y el Caribe, mediante procesos de regionalización y la creación de economías de escala que a su vez contribuyan con la inserción internacional de la región. Su plan de gobierno establece la Alianza Pacífico como una prioridad para Colombia, así como su intención de relanzar la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y participar en procesos regionales más amplios como MERCOSUR.

“Nuestra política exterior propiciará el multilateralismo y su robustecimiento, y abogará por un trato respetuoso y de franca cooperación con los organismos internacionales, en particular con la ONU y sus distintas agencias, de las cuales 24 tienen presencia en el país”, dice la propuesta.

En el plan de gobierno de Fajardo, Venezuela tiene un apartado especial: “Venezuela: una relación imprescindible”. Allí, destaca como una prioridad para Colombia y para la región la recuperación de la democracia en Venezuela y la reconstrucción de su economía. Además, figura como primordial la reapertura de consulados y el restablecimiento de un canal de comunicación directo entre Bogotá y Caracas, para “mitigar tensiones y atender asuntos binacionales urgentes” como la responsabilidad conjunta sobre la presencia de grupos armados ilegales en la frontera.

El plan de gobierno del candidato Petro no menciona la palabra “Venezuela” ni una sola vez. No obstante, ha expresado que de ser electo, restablecería relaciones diplomáticas con Venezuela. En el primer debate después de las consultas interpartidistas, Petro dijo que sería hipócrita mantener relaciones con dictaduras como la de los Emiratos Árabes Unidos y no con Venezuela.

“Colombia gana y gana, y más si los norteamericanos van a comprarle petróleo a Venezuela. Si se restablecen las relaciones diplomáticas salvamos la frontera. Se la quitamos a la mafia. Podemos industrializar la frontera. Cúcuta se vuelve boyante si aprovechamos esas circunstancias”.

Migración

Colombia es el país con más venezolanos viviendo en el extranjero, con más de dos millones. A comienzos de 2021, el gobierno colombiano lanzó un programa de regularización migratoria que permite a los venezolanos vivir y trabajar por 10 años en Colombia, y abre la posibilidad de obtener la residencia permanente e incluso la ciudadanía colombiana en el largo plazo.

El día de su lanzamiento, el programa fue elogiado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, como “el gesto humanitario más importante que se ha hecho en este continente desde 1984, cuando se firmó la Declaración de Cartagena”.

Pese a este esfuerzo nacional por lograr la integración de la migración venezolana, ninguno de los programas de gobierno de los candidatos ganadores de las consultas interpartidistas (Gustavo Petro, Fico Gutiérrez y Sergio Fajardo) incluye una propuesta relacionada con la migración.

La publicación de las propuestas ha despertado un debate en torno a qué pasos debe seguir Colombia durante los próximos cuatro años. Algunos de los debates más intensos se producen en relación a cómo ajustar la política energética para lograr una transición a energías renovables, cómo ampliar la seguridad social, particularmente el sistema de pensiones, y cómo abordar la construcción de paz y seguridad cuando aún existen grupos armados al margen de la ley.

Al candidato Gustavo Petro se le ha acusado de poder destruir el ahorro pensional con su propuesta de apropiarse de fondos de pensiones privados para financiar el pago de pensiones públicas y, adicionalmente, brindar cobertura a cerca de 3 millones de personas que nunca han cotizado.

Grupos ambientalistas han disputado la propuesta energética de Fico Gutiérrez por la incapacidad de realizar una “correcta implementación” de la explotación de yacimientos no convencionales, debido a que la técnica del fracking imposibilita mitigar el impacto ambiental. Por otro lado, en cuanto a la proposición de Gustavo Petro de no firmar nuevos contratos ni renovar licencias de exploración y explotación de petróleo, el exministro de minas y energía durante la administración del expresidente Juan Manuel Santos, Tomás González, dijo: “Dependemos en muy buena medida de nuestro petróleo y el carbón para hacer una inversión social, mejoras en infraestructura y reducir la pobreza y desigualdad”.

Las tendencias de voto reflejadas en la consulta interpartidista del 13 de Marzo parecen enmarcar un rumbo electoral. Las posturas establecidas en los planes de gobierno de los candidatos pueden reflejar en qué país podría convertirse Colombia en los próximos cuatro años, así como esas posibles alianzas que podrían sumar votos decisivos en una eventual segunda vuelta presidencial.