Covid-19

¿Qué es el distanciamiento social y por qué es importante para prevenir la Covid-19?

Un grupo de personas hace fila para entrar en un supermercado en el centro de Milán, Italia. Mantienen distancia como prevención del contagio de la Covid-19. Fotografía de Miguel Medina | AFP

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14/03/2020

La enfermedad Covid-19 se transmite por el contacto con personas infectadas, a través de las gotas de secreciones respiratorias que se expulsan al toser o estornudar. Si se respiran esas gotas o se tocan superficies contaminadas con ellas, se puede contraer la Covid-19, que fue declarada como pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Evitar el contacto con otras personas es una de las maneras más efectivas de prevenir el contagio de la enfermedad, pero no siempre es posible encerrarnos. Asistir al trabajo o salir a comprar alimentos son actividades que requieren salir y acercarnos a otras personas.

Según la OMS, las gotas que expulsa una persona infectada al toser y estornudar son muy pesadas para mantenerse en el aire por más de un metro de distancia. Mientras más personas se crucen en un día, mayor es la posibilidad de encontrarse con una persona contagiada. Esta es la razón por la que la OMS ha insistido en que se suspendan eventos masivos y se limiten las interacciones entre la población aplicando distanciamiento social.

El biólogo estadounidense Joshua S. Weitz, director del programa interdisciplinario de doctorado en Biociencias Cuantitativas de la Universidad Georgia Tech, estimó una evaluación de riesgos de asistir a eventos masivos en Estados Unidos y la probabilidad de que haya personas contagiadas, de acuerdo con la cantidad de asistentes y la cantidad de casos activos en el país.

Para la estimación, Weitz definió cinco escenarios hipotéticos: una cena de amigos (10 asistentes), una fiesta de boda (100 asistentes), un concierto pequeño (1.000 asistentes), un partido de hockey (10.000 asistentes), y el partido final del March Madness, el campeonato de primera división del baloncesto universitario de Estados Unidos (100.000 asistentes).

Las probabilidades de que al menos una persona contagiada asista a estos eventos aumentan en la medida en que el evento tenga más asistentes y que la cantidad de casos en el país sea mayor. Hasta la mañana del sábado 14 de marzo de 2020, la OMS reportaba que Estados Unidos tenía 1.678 casos confirmados. Según la estimación de Weitz, eso indica que las probabilidades de que asista al menos una persona contagiada a los escenarios más pequeños que planteó (la cena de amigos, la boda y un concierto pequeño) son menores al 1%. Sin embargo, la probabilidad aumenta a 5,9% para quienes asisten al partido de hockey, llega a 45% para los asistentes de la final de baloncesto universitario.

Pero las cifras de la OMS no son definitivas. En sus reportes, la organización solo incluye los casos confirmados con tests de diagnóstico. Puede haber más casos asintomáticos, de personas infectadas que todavía están en período de incubación o personas con la enfermedad que no han recibido las pruebas. La cifra de casos puede ser mayor.

En la estimación de Graham, si Estados Unidos llega a tener 20.000 casos, la probabilidad de que al menos una persona infectada asista a los eventos aumenta: 5,9% en un concierto pequeño, 45% en un partido de hockey, y 99% en la final de baloncesto universitario.

La suspensión de eventos masivos implementada en algunos países y la política de distanciamiento social responden a esta lógica: tratar de reducir las ocasiones en que hay más contacto social para bajar la probabilidad de contagios. La enfermedad Covid-19 es causada por un coronavirus nuevo, que surgió en diciembre de 2019 en Wuhan, China, y ha sido identificado como SARS-CoV-2. Como es nuevo, los humanos no tienen inmunización natural para combatirlo. Por eso todas las personas están expuestas a sufrir la enfermedad.

Prevenir el contagio, o al menos frenar la velocidad de la propagación, es una de las políticas que recomiendan los epidemiólogos para aplanar la curva de la epidemia y mantener la cantidad de pacientes dentro de la capacidad de atención del sistema de salud. Así se garantiza que los recursos médicos, camas y personal sean suficientes para atender a quienes requieren dicha atención.

Los dos países que han logrado controlar su curva epidémica, por ahora, son China y Corea del Sur. En ambos casos los gobiernos impusieron medidas estrictas de distanciamiento social, aislamiento de todos los casos confirmados y sospechosos, así como políticas de diagnóstico masivo para identificar casos rápidamente. En el caso de China, también se prohibió la movilidad en Wuhan, la ciudad donde se originó el virus.

La diferencia principal entre el distanciamiento social y la cuarentena es que el distanciamiento social no implica necesariamente limitar el movimiento de la persona a un área determinada.

En principio, el distanciamiento social es una medida recomendada para todas las personas que no han presentado síntomas de la enfermedad. Para las personas que ya tienen síntomas o han estado en contacto con una persona que se ha confirmado como paciente de Covid-19, la recomendación es hacer cuarentena y aislarse de forma voluntaria. Las personas con diagnóstico confirmado deben mantenerse aisladas.

Se ha recomendado que las personas ancianas se mantengan en sus casas para evitar exponerse al virus. Según los datos del reporte conjunto entre la OMS y el gobierno chino, el riesgo de muerte por la enfermedad aumenta en personas con más de 60 años.

La misma recomendación aplica a las personas que padecen enfermedades de base, como enfermedades respiratorias, asma, enfermedad cardiovascular y diabetes. En esos casos también aumenta el riesgo de muerte, según el reporte de la OMS.

Por eso también se recomienda limitar las visitas a las personas mayores. Sin embargo, la OMS ha expresado que es importante la solidaridad, para conseguir mecanismos que ayuden a las personas más vulnerables a evitar salir de casa. Por ejemplo, organizar dispositivos para llevarles alimentos o hacer sus compras.

Si es necesario salir de casa, se recomienda aplicar las medidas personales de prevención, tratar de usar el transporte público en horarios diferentes a las horas pico a fin de coincidir con menos personas. Evitar tocar superficies comunes para muchas personas, como pasamanos, puertas, botones en los ascensores. Si se tocan, usar antibacterial para desinfectarse, evitar tocarse la cara y lavarse las manos con agua y jabón cuando sea posible. Hacer compras con envíos a domicilio; si se va a ordenar comida, elegir platillos cocinados en lugar de opciones crudas, como sushi.

Al regresar a casa, se recomienda tomar una ducha inmediatamente, quitarse la ropa y zapatos usados, y no mezclarlos con la ropa limpia.

En algunos países se ha pedido que las personas que tengan síntomas o se hayan expuesto al virus, se comuniquen con los servicios de salud, se mantengan aislados y no acudan a los hospitales a menos que sus síntomas sean severos y requieran atención médica.

¿Cómo prevenir el contagio?

La recomendaciones principales de la OMS son:

Lavar las manos con agua y jabón con frecuencia, o usar gel desinfectante con una base de alcohol de al menos 60%.
Evitar tocarse la cara con las manos.
Cubrirse al toser o estornudar con la parte interna del brazo.
Evitar el contacto con personas infectadas.
Mantenerse al menos a un metro de distancia de otras personas.
Evitar actos públicos con asistencia masiva.
Desinfectar las superficies con las que se tiene contacto frecuentemente
Permanecer en casa si presenta síntomas.

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Si usted ha viajado o ha tenido contacto con personas que hayan estado en países afectados, o presenta síntomas similares a los de la enfermedad, consulte a su médico.