Una proclama en el Aula Magna de la UCV

El moderador leyó las reglas: cada vocero subiría al estrado con 3 compañeros, tendría 4 minutos para desarrollar su intervención y usaría un lenguaje respetuoso para “no emular lo que estamos criticando”. El evento fue convocado el martes 6 de marzo de 2018 en el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela (UCV). La iniciativa organizada por la Asociación de Profesores (Apucv) reunió a representantes de gremios, sindicatos, estudiantes y ciudadanos bajo el lema “Venezuela unida no se rinde”.

A las 10:30 de la mañana, el aforo para 2.700 personas estaba lleno. Unos 40 jóvenes identificados con camisetas del movimiento estudiantil ingresaron al Aula Magna cantando consignas y repicando tambores. El público aplaudió y agitó banderas y pancartas que mostraban la palabra “Unión”. Víctor Márquez, presidente de la Apucv y moderador, pidió a los asistentes ponerse de pie para recibir a las autoridades de la casa anfitriona, liderados por la rectora Cecilia García Arocha. Como si se tratara de una graduación bajo las Nubes de Calder, los espontáneos aplaudieron y corearon “U-U-UCV”, mientras los rectores de varias universidades caraqueñas desfilaron por el pasillo central hasta la primera fila. El Orfeón Universitario cantó el himno nacional.

García Arocha cumplió las reglas: subió al estrado acompañada de tres miembros del equipo rectoral y habló sobre la autonomía universitaria y la necesidad de fortalecer el vínculo entre las organizaciones que forman la sociedad civil.

Cecilia García Arocha, rectora de la UCV, junto con los miembros del equipo rectoral

Varias intervenciones después los estudiantes rompieron el protocolo, subieron al escenario, tomaron el micrófono y repasaron los hitos de la juventud en la historia venezolana. Pidieron un minuto de silencio por una estudiante de octavo semestre de Biología que falleció porque no completó un tratamiento que debía recibir después de sufrir un accidente debido a la escasez de medicamentos.

Pablo Zambrano, dirigente sindical del sector salud, expresó indignado que no hay insumos médicos ni de limpieza en los hospitales, faltan equipos y el ingreso mensual de enfermeras y obreros está por debajo del salario mínimo. Habló de la migración masiva del personal de centros de asistencia pública, quienes abandonan sus cargos sin presentar la renuncia.

La transición del primer bloque al segundo tuvo como soundtrack una versión del “Alma llanera”. Durante esos minutos varios dirigentes políticos y diputados de la Asamblea Nacional se saludaron. La gente festejó su presencia cuando los mencionaron a través del micrófono. Los más aplaudidos fueron Andrés Velásquez y Juan Pablo Guanipa. En octubre de 2017, Velásquez denunció que le robaron la gobernación de Bolívar en las elecciones regionales. Guanipa no pudo asumir la gobernación de Zulia porque no se presentó ante la Asamblea Nacional Constituyente.

Las primeras propuestas se escucharon a partir de la cuarta intervención, cuando Raquel Figueroa, representante del sector educativo, pidió elaborar un programa de reconstrucción social e impulsar las asambleas de ciudadanos.

Rectores de las universidades venezolanas en el Aula Magna de la UCV

El segundo bloque de oradores culminó pasado el mediodía. Podían verse varias sillas vacías. La canción “Venezuela”, escrita por los españoles Pablo Herrero Ibarz y José Luis Armenteros Sánchez, abrió la última parte de la asamblea. Algunos levantaron los brazos y los movieron de un lado a otro como si se tratara de un concierto.

Al tomar el micrófono, Nicmer Evans reconoció diferencias ideológicas con varios de los presentes, pero rescató la idea de articular un movimiento en la sociedad civil para hacer cumplir el artículo 70 de la Constitución a través de asambleas con poder vinculante. Para él también hubo aplausos.

En este segmento también intervino el padre José Virtuoso, rector de la Universidad Católica Andrés Bello, quien habló en nombre de la Iglesia. Pidió un proceso electoral justo que cumpla con la transparencia y garantice la competitividad entre los candidatos. Propuso que se replicara la convocatoria de la UCV en otros espacios del país.

Cuando el reloj marcaba la 1:00 de la tarde hicieron otro minuto de silencio, esta vez por las víctimas en las protestas de 2014 y 2017. Los familiares de Neomar Lander, un joven de 17 años asesinado durante las revueltas del año pasado, tomaron la palabra. Habló el padre, habló la hermana y el moderador interrumpió la intervención de la madre, alegando que el cierre de la asamblea se había extendido por más de una hora.

Un video musical antecedió la lectura de la proclama final. Mostraba a los artistas Nacho y Franco de Vita durante la grabación de “Valiente”, una canción lanzada el 1 de septiembre de 2016 para aupar a los manifestantes que asistieron a la “Toma de Caracas”.  

Al evento asistieron al menos 40 jóvenes del Movimiento Estudiantil

La periodista Alba Cecilia Mujica leyó el documento que exige la activación de un canal humanitario de alimentos y medicinas, políticas económicas para frenar la hiperinflación y la especulación, garantías para el ejercicio libre del derecho al voto, con un árbitro imparcial y el respeto a las condiciones y plazos previstos en la ley. Los países integrantes del Grupo de Lima adelantaron que no reconocerán los resultados de la elecciones si no se garantiza la competitividad de los comicios.

“Vayamos a la lucha por salir de este nefasto gobierno. Venezuela unida no se rinde. El cambio es por una vida digna, progreso y libertad”.  

Al finalizar el evento el moderador pidió a los asistentes abandonar el recinto después de que lo hicieran las autoridades universitarias. Los integrantes de “Dale letra al cambio” gritaron consignas mientras las personas salían del Aula Magna. Algunos hablaban entre sí: se preguntaron si ese había sido el nacimiento de un frente amplio nacional.