Destacadas
Te puede interesar
Los más leídos
La pregunta es sencilla y la respuesta también: sí. Lo difícil es entender las causas que conllevan a que haya un número mayor de muertes en las fechas decembrinas que el resto del año.
Estudios científicos sobre las causas de muerte han revelado que el número de fallecimientos que se observan en los días de Navidad y Año Nuevo son, en promedio, 10 a 30% mayores que los demás. Un estudio extenso publicado en 2010, en el cual se evaluaron las fechas y causas de muerte, reveló un pico significativo para todas las causas de muertes naturales (no accidentes, homicidios o suicidios) tanto en el día de Navidad como el día de Año Nuevo. El estudio mencionado evalúa en extenso todas la causas de muertes (cardíacas, infecciosas, cáncer, metabólicas, etcétera) y es tremendamente llamativo que, independientemente de la causa de muerte, el pico de mortalidad es bastante notorio en estos dos días del año.
El estudio que analiza la data desde 1979 hasta 2004 en Norteamérica (más de 57 millones de certificados de muerte ), reporta un exceso de muertes acumulado (número de muertes mayor de lo esperado) de aproximadamente 42.000, correspondiente a los días festivos. Esto representa una mortalidad promedio de 3 a 29% mayor que el promedio por día en comparación con los otros 363 días del año. El estudio citado revisó el día y las muertes producidas por causas no traumáticas, se compararon las tasas de mortalidad en los pacientes que fallecen el mismo día de ingreso a emergencia o aquellos fallecidos durante el traslado a emergencia y se comparó con aquellos fallecidos que se encontraban hospitalizados o que fallecieron en su casa. Estudios de otras latitudes (Reino Unido, Australia, norte de Europa) revelan esta misma tendencia y es igualmente llamativo que tenga un comportamiento creciente en los últimos 20 años, pues el pico de mortalidad se hace más notorio.
El estudio publicado en el 2010 intenta esclarecer las razones que expliquen el aumento de las muertes, pero lamentablemente los datos no son lo suficientemente contundentes para imputar una causa más que la otra, pero acercarse a estas posibles explicaciones puede ser interesante y, en algún caso, preocupante también.
Stress psicológico: las fechas sin duda son una época especial del año en la que los sentimientos están a la orden del día (para bien o para mal). Si bien este fenómeno puede explicar muertes cardíacas, es difícil que sea la explicación para el aumento de muertes por cáncer, causas respiratorias o metabólicas. A pesar de ser una razón posible, es difícil probarlo.
Emergencias congestionadas: en este sentido hay una tendencia a mayor colapso por cantidad de pacientes de las emergencias en los últimos 10 años. Eso puede dificultar el acceso a pacientes críticos o retardar la acción médica en “la hora dorada” (lapso durante el cual la probabilidad de éxito de maniobras de resucitación son mayores). Esto se evidencia de forma clara en la mortalidad aumentada en los pacientes Nivel 1 (aquellos con las emergencias más graves). Un concepto relativamente reciente es que los aspectos “administrativos” del hospital pueden afectar la mortalidad. Hoy en día sabemos que no es lo mismo ingresar a la terapia intensiva de noche que de día; tampoco es igual ingresar un fin de semana que en día de la semana; también pueden influir factores como la destreza de los médicos de guardia. Casi universalmente, los médicos que inician su formación lo hacen los primeros días del año y además los médicos más experimentados disfrutan de vacaciones durante esos días, haciendo que la capacidad resolutiva médica se vea afectada en estas fechas.
Recientemente el sistema nacional de salud inglés (NHS) ha analizado este punto y están tratando de evaluar fórmulas que minimicen este impacto. En Venezuela, estudios realizados en hospitales docentes de Caracas han encontrado que el nivel de formación del médico de guardia (primero, segundo o tercer año) , lo mismo que el día (fin de semana versus días de semana) y la hora de ingreso (a.m. versus p.m.) son factores que puede influir en la mortalidad de unidades críticas como terapia intensiva, cuidados neonatales, emergencias, etcétera. También ha sido notorio que en vacaciones es más difícil mantener tanto el staff médico y paramédico como los servicios de apoyo (radiología, laboratorio, estudios invasivos) en su total capacidad, incluso en países muy desarrollados.
Retraso de consultas: es bastante común en las fechas decembrinas que los pacientes minimicen los síntomas o los hagan menos notorios ante sus familiares, con la premisa de que sus doctores no están de trabajo en horario normal. Eso puede traer como consecuencia que algunas condiciones médicas se deterioren repentinamente y lleguen con un nivel de compromiso a la emergencia mayor que durante las fechas normales.
Teoría del desplazamiento: las vacaciones generan una movilización de los pacientes, esto conlleva a que los pacientes no tienen sus médicos y facilidades habituales y enfermarse fuera de su entorno siempre es una dificultad mayor. Este fenómeno es particularmente crítico para los pacientes con cáncer, de hecho, la mortalidad de los pacientes hospitalizados con cáncer no es mayor en los días de asueto decembrino comparada con aquellos que no están hospitalizados.
Alcohol y drogas: el estudio norteamericano reflejó que el consumo de sustancias prohibidas y alcohol era un factor importante como factor de riesgo para muerte. Hay que aclarar que estamos hablando de muertes no violentas o accidentes. Pareciera no haber mucha duda que los excesos favorecen eventos negativos: en promedio, el uso de alcohol y sustancias prohibidas aumentan entre 25 y 30% la mortalidad. Como dato curioso, la mortalidad también aumenta en los días que el consumo de sustancias estupefacientes son notorias, como el 5 de julio (el día posterior a la celebración del Día de la Independencia) y el spring break.
Aspectos climáticos: algunos expertos han tratado de explicar el fenómeno por la influencia del frío extremo sobre algunas condiciones como infecciones respiratorias. Si bien es cierto que el pico de mortalidad por influenza está relacionado con los meses de frío, la mortalidad en países subtropicales, incluso en el Hemisferio Sur, también presenta picos de mortalidad en diciembre. Así que, si bien podría explicar algunas de las causas de muerte, no explicaría otras causas menos vulnerables.
Es posible que en determinadas circunstancias los cuidados médicos y, particularmente, los paliativos se de-escalen luego de llegar a determinado punto o fecha, (llegada de familiar, cierre de ciclos, reuniones familiares) y esto podría explicarse para cáncer terminal pero no para las otras causas de muerte. Otro efecto de menor cuantía es el hecho de que cuando las muertes ocurren en fechas desconocidas se imputan administrativamente al 01/01 de cada año. Esto podría explicar al menos una parte del pico el día de Año Nuevo, pero no podría explicarlo para Navidad.
En definitiva, es un hecho notorio que mueren una proporción mayor de personas los días de Navidad y Año Nuevo (al menos en el mundo occidental). Las razones pueden ser múltiples y la magnitud con que ellas interactúan no son claras para la ciencia. Ante eso, sólo nos queda tratar de evitar aquellas causas que dependen de nuestras conductas y decisiones, además de profundizar en los misterios de la ciencia para poder tener un panorama más exacto de los factores relacionados con la muerte. Porque la muerte no toma vacaciones.
Julio Castro Méndez
ARTÍCULOS MÁS RECIENTES DEL AUTOR
Suscríbete al boletín
No te pierdas la información más importante de PRODAVINCI en tu buzón de correo