La Fundación para la Cultura Urbana cumple 20 años

Un amplio fondo editorial, un concurso literario transgenérico, más de 100 actividades de formación y discusión multidisciplinarias, discos, audiovisuales, exposiciones son el aporte de la FCU en esta trayectoria para fomentar el debate plural de ideas y construir ciudadanía.

La FCU se adapta a las condiciones impuestas por el confinamiento y lleva su programación aniversaria a nuevos formatos.

La Fundación para la Cultura Urbana cumple 20 años de creada. En mayo de 2001 se hizo el anuncio público de su existencia y de la misión para la que fue concebida: investigar la ciudad, los fenómenos culturales que en ella se generan y estimular un debate plural para la formación integral ciudadana. Se identificaron cinco áreas de trabajo como plataformas para el desarrollo de acciones con visión de largo plazo: editorial, musical, audiovisual, fotográfica y académica.

La creación y características de la FCU son producto de la visión de los directivos de Econoinvest y Central Banca Universal, quienes la concibieron como un brazo ejecutor de sus acciones culturales, cuyo norte hasta la actualidad ha sido la formación integral ciudadana como base para el desarrollo. Herman Sifontes, Juan Carlos Carvallo, Ernesto Rangel, Jesús Quintero Yamin, Gabriel y Miguel Osío, así como, Alejandro Gómez Sigala delimitaron, hace dos décadas, el proyecto con su primer presidente, el escritor Rafael Arráiz Lucca.

La Fundación para la Cultura Urbana surge como una necesidad natural de acompañar el desempeño empresarial de estos grupos financieros, dirigidos a promover el ahorro y la inversión con visión de largo plazo, con una institución que estimulara simultáneamente el conocimiento, la creación, la sinergia entre especialistas y fomentara los valores asociados al mejor desempeño de la vida en ciudad. Esta propuesta introdujo una iniciativa privada en la actividad cultural del país desde una perspectiva y foco renovados: la ciudad como generadora de cambios.

Pensar la ciudad

Durante los primeros diez años la FCU centró buena parte de sus acciones en facilitar espacios para la formación y el intercambio en dos vertientes muy concretas: la gestión urbana, enfocada en hacer aportes en la discusión e identificación de herramientas para resolver dilemas que afrontaban nuestras ciudades y fomentar la mejor praxis para la gestión de recursos y servicios, procurando ser un puente entre sectores académicos y autoridades.

Así, en alianza con organizaciones y universidades se logró la visita de figuras de la talla de Oriol Bohigas (responsable de la renovación de Barcelona, España), de los exalcaldes de Bogotá, Enrique Peñalosa y Antanas Mokus, el urbanista italiano Giorgio Piccinato, el alcalde chileno Mario Olavarría y de Sergio Fajardo Valderrama, para el momento el destacado alcalde de Medellín; experiencias todas que, sin duda, redundaron en beneficio de la visión de ciudad.

Oriol Bohigas en expo Cenital

Urbanismo, planificación urbana, transporte, movilidad, espacio público y seguridad ciudadana son algunos de los temas que la FCU promovió ampliamente, creando por ello fuertes vínculos con otras instituciones y con especialistas dedicados al estudio de las ciudades fuera y dentro de Venezuela.

La segunda vertiente era la promoción y divulgación del pensamiento y la creación generada a partir de la experiencia urbana. En este sentido, la trayectoria institucional de la Fundación para la Cultura Urbana ha sido diversa y prolija: un sello editorial multidisciplinario con más de 130 títulos publicados, dividido en tres colecciones (numerada, cuadernos y ediciones especiales); la creación y consolidación del concurso literario Premio Anual Transgenérico ―que este año llega a su vigésima edición―, el desarrollo de más de 100 actividades de formación, reflexión e intercambio de carácter gratuito, siendo las más significativas la Cátedra de Imágenes Urbanas ―creada y tutelada por Tulio Hernández―, los talleres organizados con la FNPI ―ahora Fundación Gabo―, y las conferencias anuales dictadas por el filósofo español Fernando Savater; el periodista Jon Lee Anderson; el poeta Luis García Montero; los escritores Jorge Volpi, Adolfo Castañón y Juan Villoro y el arquitecto Alberto Saldarriaga, entre otros.

Jorge Volpi

A esto se sumó la producción de discos, audiovisuales, exposiciones fotográficas, conciertos, intervenciones urbanas y un trabajo sostenido dirigido a crear y fomentar un sistema muy sólido de relaciones profesionales e institucionales. Esta destacada labor la hizo merecedora en 2011 de un reconocimiento de la Academia Venezolana de la Lengua por su prolongada labor en la promoción de los valores literarios y lingüísticos del país.

A partir de 2010 y hasta 2015 las actividades de la FCU sufren una reducción importante en número y diversidad, dada la presión a la que es sometido el grupo de empresas que la patrocinan. Sin embargo, gracias a que un importante grupo de escritores y figuras claves del sector cultural (casi 900 personas) emprenden una acción de recuperación institucional de manera espontánea, liderada por Rafael Cadenas (presidente vitalicio), Joaquín Marta Sosa, Alexis Romero y Andrés Boersner, la Fundación para la Cultura Urbana pudo seguir con sus actividades, en especial con la producción de libros ―nuevos títulos y reediciones―, garantizando la convocatoria de su premio literario. La Sociedad de Amigos de la Cultura Urbana, tutelada por Andrés Boersner, preservó el espíritu institucional y condujo generosamente a la Fundación a un proceso de recuperación, demostrando el compromiso del sector con el buen hacer institucional.

Nuevos debates, nuevas perspectivas

Hoy, bajo la conducción del reconocido historiador y escritor Elías Pino Iturrieta, la Fundación para la Cultura Urbana vive una nueva etapa y sigue trabajando para crear y articular espacios de reflexión en torno a la ciudad y los fenómenos culturales que en ella se generan, siempre desde la perspectiva del desarrollo y del estímulo de la ciudadanía. Con una firme vocación de servicio.

Tal como lo señala su presidente, “los tiempos han cambiado para la Fundación y para el país, en consecuencia, ahora la FCU trabaja partiendo de las nuevas realidades”. La institución vuelve sobre los primeros pasos y quiere estar presente en los nuevos y necesarios debates, abriendo nuevas líneas de investigación que sean útiles a la sociedad venezolana. Por esa razón ha emprendido una revisión transdisciplinaria del siglo XX venezolano, un gran examen panorámico del siglo pasado que pretende abarcar todos los ámbitos de la vida del país, aquellos que construyeron la sociedad que conocemos y trazaron su particularidad, desde el año 1900 hasta el 2000. El Siglo XX venezolano es una gran investigación enciclopédica, larga y profunda que está en desarrollo y que reunirá a importantes investigadores y especialistas en cada área de revisión.

Desde la perspectiva editorial, la FCU emprendió el año pasado un ambicioso proyecto de coediciones con la editorial española Visor que quiere propiciar la difusión de la obra de poetas venezolanos nacidos fundamentalmente en los años cincuenta y sesenta del siglo pasado y que en sus libros han expresado con rigor y excelencia la claridad de su voz poética. Gracias a ello, en los próximos 9 años se editarán dos libros anuales. Por otra parte, se continuará con la edición anual de dos o tres libros en la colección numerada, incluyendo la obra ganadora del Premio Anual Transgenérico y las ediciones especiales de la mano del Archivo Fotografía Urbana.

Este año se estima la concreción de un proyecto importante, el inicio de edición de libros digitales que permitirá dinamizar y diversificar el acceso al fondo de un universo de lectores fuera y dentro de las fronteras.

La FCU tiene previsto celebrar a lo largo de todo 2020 su vigésimo aniversario con varias actividades y acciones de comunicación. La actual situación de confinamiento y restricción obliga a la FCU a desarrollarlas en formato digital hasta próximo aviso.

Dos programaciones serán ejes de acción: una serie dedicada a la investigación El Siglo XX Venezolano, de la que partirán foros y encuentros virtuales, y una completa programación de actividades para revisitar el fondo editorial de la FCU y valorar los aportes, actualizar temas, contenidos, autores, perspectivas de estudios y propuestas contenidas en ese universo. Entrevistas, charlas, conferencias, clubes de lectura, entre otras actividades, serán las vías para explorarlo.

Seguimos adelante con entusiasmo y compromiso, agradecidos por el apoyo recibido durante estos años de diversas instituciones, profesionales, investigadores, docentes, autores, artistas, gestores culturales, medios, amigos y otros actores del ámbito cultural.

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